Esta es la historia de Mateo, un joven que a sus cortos 25 años de edad reflejaba en su trabajo lo que sus padres nunca corrigieron cuando era solo un niño…
Mateo trabajaba en la planta de producción, de aquella empresa; que aun no logro recordar bien su nombre era un buen jefe pero tenía un defecto oculto, era amigo de lo ajeno, solía llevarse a su casa las memorias, mp3, celulares y todos aquellos artículos que cabían con facilidad en su bolsillo, un día Mateo tenía todo fríamente calculado, ya todo estaba listo para el plan de esa madrugada de el día 23 de enero de aquel mil novecientos algo, Mateo sabia que don Rogelio de 2 a 3 a.m. siempre se echaba su motosito, y a eso de las 2:30 decidió llevar a cabo su plan, se agacho a coger la caja que contenía el computador, realizo una mala postura que le ocasionó daños en su columna, don Rogelio al escuchar gritos de dolor, salio dando tiros como loco ocasionándole a Mateo la perdida de la movilidad de sus piernas.
Recuerda: No hay mejor satisfacción, que conseguir las cosas con esfuerzo propio.